Resumen

El proyecto busca implementar estaciones de aviso de sanidad vegetal en Mallorca, con el fin de mejorar la gestión sanitaria y optimizar el uso de recursos en la agricultura ecológica. La tendencia al alza de la agricultura ecológica en la región muestra un gran potencial de transformación agrícola, pero se enfrenta a problemas como enfermedades causadas por hongos y limitaciones en el uso de productos. La solución propuesta implica la creación de un sistema de avisos sanitarios y un sistema de control hídrico, basados en modelos predictivos y herramientas de monitorización del suelo. Se espera reducir el uso de tratamientos, ahorrar agua, disminuir las emisiones de CO2 y aumentar la producción.

Problemática

Uno de los problemas a los que se enfrenta la agricultura ecológica en Mallorca es la aparición de enfermedades causadas por hongos en cultivos como el olivo, la viña y la huerta, así como en las limitaciones impuestas por las normativas que restringen el uso de productos, especialmente el cobre. Además, el cambio climático ha generado una creciente escasez de agua en la región mediterránea, lo que afecta directamente a la agricultura y demanda una mayor eficiencia en su uso.

Colaboración

La colaboración entre APAEMA (Asociación de Productores Agroecológicos de Mallorca) y la Fundación Mallorca Preservation ha sido fundamental para la implementación de este proyecto, demostrando un compromiso compartido con el desarrollo del sector ecológico en Mallorca. La Fundación ha brindado apoyo financiero, contribuyendo con 15.300€ para los próximos 3 años. Juntos, trabajamos para promover la eficiencia y la profesionalización de la agricultura ecológica en la isla.

Objetivos

• Implementar un sistema de avisos sanitarios basado en modelos predictivos para controlar plagas y enfermedades.
• Desarrollar un sistema de control hídrico que optimice el consumo de agua en las fincas agrícolas.
• Mejorar la gestión sanitaria en la agricultura ecológica.
• Reducir el uso de tratamientos, especialmente el cobre.
• horrar agua y reducir la huella hídrica de los cultivos.
• Disminuir las emisiones de CO2 asociadas al uso de tractor.
• Incrementar la producción agrícola entre un 10% y un 25%.
• Posicionar a la agricultura ecológica como referente en gestión sanitaria y uso eficiente del agua.