Una nueva era para la conservación de la naturaleza: La firma del Acuerdo sobre Biodiversidad Cop15
La firma del acuerdo sobre biodiversidad Cop15 en Montreal (Canadá) marca un hito importante en el esfuerzo mundial por detener la destrucción de los ecosistemas de la Tierra y avanzar hacia una vida en armonía con la naturaleza para mediados de siglo. El acuerdo, firmado por los gobiernos de casi 200 países, establece una serie de objetivos para alcanzar esta meta.
Uno de los elementos clave del acuerdo es el objetivo “30×30” , que pretende proteger el 30% del planeta de aquí a 2030.Para ello será necesario duplicar la superficie protegida en tierra y cuadruplicar la de los océanos. El acuerdo también incluye objetivos para reformar 500.000 millones de dólares de subvenciones perjudiciales para el medio ambiente y restaurar el 30% de los ecosistemas degradados del planeta. Además, el acuerdo pretende detener la extinción de especies provocada por el hombre y promover su recuperación.
El biólogo marino Enric Salaque ha participado en la defensa del objetivo "30x30", describió el acuerdo como histórico y el "equivalente en la naturaleza del Acuerdo de París sobre el clima". Sala destacó la importancia de proteger los grandes ecosistemas intactos, como la selva amazónica y la cuenca del Congo, así como los ecosistemas únicos a nivel nacional.
Sala también subrayó los beneficios potenciales de las reservas marinas, especialmente en el Mediterráneo, donde actualmente sólo el 1% está protegido de la pesca. Afirmó que proteger el 30% adecuado de los océanos no sólo evitaría la extinción de especies, sino que también ayudaría a alimentar de forma sostenible a la creciente población humana y proporcionaría otros beneficios, como el secuestro de carbono.
La firma del acuerdo sobre biodiversidad Cop15 supone un importante paso adelante en el esfuerzo mundial por proteger y preservar el mundo natural. Queda por ver, cómo se aplicará el acuerdo y qué impacto tendrá sobre el terreno. No obstante, el compromiso de casi 200 países de trabajar por un futuro más sostenible es una señal esperanzadora de que, juntos, podemos cambiar el rumbo de la crisis de extinción a la que se enfrenta la naturaleza.